Si algo caracteriza a la gran mayoría de los tucumanos es, mal que nos pese, la capacidad para incumplir la ley. Así, escuchar que en la provincia no se respetan los semáforos, las sendas peatonales, se conduce habiendo bebido alcohol, se maneja una moto sin casco, entre tantos otros ejemplos, no es algo que genere sorpresa.
Sin embargo, eso no sucedió con la ley antitabaco (7575), que está en vigencias desde hace cuatro años, logrando una rápida adaptación por parte de la población de fumadores y no fumadores, y que es un ejemplo para otras provincias.
Hoy, Tucumán es una de las provincias "libres de humo" y los datos recogidos por el IPLA dan cuenta de que el cumplimiento de esta ley alcanza casi un 100%.
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