1- Una granja ecológica.- A ocho kilómetros de Tafí del Valle, por la ruta 307 en dirección a Amaicha, un mundo quiere ser nuevo. En la granja ecológica "Guiados por la Pachamama", el lugareño Roberto Fernández trabaja la tierra, recibe visitas, vende hierbas y ofrece un recorrido guiado. El lugar está situado en un terreno con mucha pendiente y, en su punto más alto (a los 2.400 metros sobre el nivel del mar) se puede ver todo el valle de una manera excepcional.
2- Una tienda de artesanías.- Setenta años atrás, entre sus paredes de adobe se tejía el día a día de Tafí del Valle. La posta de Ata, el local de artesanías ubicado en la galería Don Goyo, frente a la plaza principal, supo ser la primera y única casa de ramos generales del pueblo, y allí quedaron guardadas mil historias que cabalgan entre el mito y la realidad. El dueño de aquel viejo almacén era don Goyo, un conocido señor de la época. En la actualidad, la casona es una visita obligada para los que aprecian las artesanías. Se ofrecen tejidos, joyas de alpaca y de piedra, lámparas, duendes y cientos de cosas más hechas por manos tafinistas.
3- Una excursión a las alturas.- Desde que se inicia el trayecto, en la localidad de El Rincón, el paisaje parece convertirse en una pintura. Una alfombra verde se extiende por las lomadas y acompaña al visitante hacia la Quebrada del Portugués, un sitio virgen a pocos minutos de El Mollar, donde lo único que puede hacerse es respirar y contemplar. Y no es poco. Para llegar hay que ir hasta El Mollar y tomar el camino que lleva hasta las localidades de El Poterillo y El Rincón, donde se debe girar hacia la izquierda. Ahí empieza un camino sin desperdicio.
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